Un derecho de autor hablando mal y pronto es un derecho (legalmente reconocido) para crear una copia de una cosa. En la mayoría de los países, si escribes un libro, haces una foto o por ejemplo desarrollas un programa de ordenador (software) solo tú tienes derecho a hacer copias.
El tema es que puedes también como autor dar permiso a otras personas a copiar e incluso ceder el control a otra persona o entidad.
Las leyes de derechos de autor son diferentes y cambian de un país a otro pero es cierto que la mayoría a nivel internacional firmaron el Convenio de Berna con el que reconocen los derechos de autor. De esa forma si tú escribes un libro en España tu trabajo tendrá derecho de autor en todo lo que se ve en azul en la siguiente imagen:
El tema es que todo eso es muy anterior a los programas, a la programación de software y las leyes se redactaron antes de que surgieran siquiera los ordenadores.
Regulan la copia de una obra pero … un programa de ordenador es una copia y solo existe y tiene sentido si se copia.
Copiando que es gerundio
Claro amigo/a/e que lo que obtienes cuando compras un software es una copia. Puede ser por ejemplo una copia en un DVD, en un CD, en un disquete o en una tarjeta SD. Puede ser directamente una copia descargable a tu disco duro también.
La cosa es que obtienes una copia y luego posiblemente vas a necesitar copiarla más veces. Por ejemplo si realizas backups diarios tendrás una copia de la copia en otro almacenamiento. El programa o parte del programa acabará copiado en memoria RAM y puede que incluso en la memoria SWAP.
Y la copia no pierde calidad. Son copias que son idénticas a diferencia de las fotocopias de documentos en papel.
Uso de licencias para modificar los derechos de autor
El software por tanto (los programitas) está sujeto a las leyes de derechos de autor. La mayoría del software suele publicarse con una licencia que no es más que un documento legal que modifica los términos de los derechos de autor.
Antiguamente solían vender software que venía en cajas como las de los cereales. Eso es bastante gracioso porque al abrirlas luego encontrabas un triste CD o un disquete y con suerte un manual impreso. Podía venir un mensaje impreso en la caja con el cual al usar ese software estabas aceptando la Licencia de Usuario Final.
Esos acuerdos son lo que llamamos EULA (Acuerdo de Licencia del Usuario Final).
En términos generales, un EULA es un contrato legalmente vinculante entre el propietario del software y el usuario final, más específicamente un contrato entre el licenciador de un producto y el licenciatario. El acuerdo especifica los derechos y restricciones que se aplican a un determinado software.
¿Sigues despierto amigo/a/e? Es aquí a donde queríamos llegar con tanto rollo.
La licencia puede modificar los derechos de autor para ofrecer libertades en vez de restricciones.
Licencias de hippies para liberar programas
En los mundillos del software libre el software generalmente suele venir con un archivo llamado COPYING en el que viene la licencia.
Como norma general la licencias de software privativas restringen derechos mientras que licencias utilizadas en software libre como la GPL (la General Public License, Licencia Pública General) otorgan derechos como por ejemplo el poder redistribuir el software (tanto el código como los binarios) e incluso modificarlo. Esto es algo muy bueno porque representa una flexibilización de las restricciones previstas por las leyes de derechos de autor.
La licencia GPL es la licencia principal que utiliza el Kernel Linux.
La GPL fue creada por Richard Stallman en 1989, para proteger los programas liberados como parte del proyecto GNU. La GPL original se basó en la unificación de licencias similares utilizadas en versiones anteriores de GNU Emacs, GNU Debugger y de GNU C Compiler.
La Free Software Fundation (FSF) la fundó Richard Stallman en 1985 y defiende «el software libre» (free software, no en el sentido de gratis y si de libertad para copiar, modificar, distribuir, … el software).
Las libertades del software libre son:
- La libertad de ejecutar el software como te plazca y con cualquier objetivo
- La libertad de estudiar como funciona el programa y cambiarlo a tu gusto (esto implica el poder acceder a su código)
- La libertad de poder redistribuir copias del programa a los demás
- La libertad de poder distribuir también tus mejoras al programa original
Existe gente muy cansina en la comunidad del software libre que se tiran toda la vida repitiendo las 4 libertades y hablando de que han probado noseque nueva distro.
Al existir licencias que en vez de restringir otorgaban libertades surgió el termino «Copyleft» en contraposición al «Copyright». Las licencias copyleft buscan por tanto garantizar las libertades a los usuario para copiar que es lo contrario de aquello para lo que se crearon los derechos de autor.
Algo importante es que las licencias Copyleft requieren que si modificas el programa has de distribuir los cambios bajo los mismos términos de la licencia.
La GPL para que ninguna empresa se apropie de programas libres
Es normal encontrar dos versiones de la licencia GPL: La 2 y la 3. Ambas versiones aplican las 4 libertades comentadas anteriormente y son copyleft porque establecen explicitamente que los trabajos derivados han de publicarse también bajo la licencia GPL.
Copyleft significa que cualquiera que redistribuya el software, con o sin cambios, debe transmitir la libertad de poder seguir haciendo más copias y cambios.
La GPL es un contrato legal vinculante
En 2017 el tribunal federal de los Estados Unidos de América concluyó que la GPL era un contrato legal vinculante.
Esto pasó porque una empresa coreana Hancom Inc. desarrollaba un producto llamado Hancom Office. Desde 2013 llevaban usando Ghostscript sin cumplir con la licencia AGPL que les obligaba a que si redistribuían su software en forma de binario tenían que liberar el código fuente.
Hancom lo usaba dentro de su software para la parte de leer PDFs e independientemente que ganasen dinero por vender Hancom Office el problema era que no cumplían con la licencia al no liberar los cambios.
Hancom dijo que nunca firmó nada, ya que la licencia AGPL no era un contrato. La juez Jacqueline Corley determinó que la GPL si era un contrato vinculante.
Finalmente Hancom llegó a un acuerdo con Artifex (la empresa que desarrolla Ghostscript).
Sobre las licencias Creative Commons
Más que al software las licencias Creative Commons se aplican a material como fotografías, vídeos, libros, …
Las 6 diferentes licencias Creative Commons buscan diferentes fines y depende de como la configures tienes una licencia libre o no tan libre.
Agradando a las empresas con el Open Source
Parece ser que en el mundo académico y entre entusiastas el movimiento del software libre calaba bien pero no tanto en el mundo empresarial.
Allí parecía que no terminaba de encajar porque básicamente la finalidad de las empresas y del capitalismo es la de ganar dinero y depredar el planeta. Veían como algo muy loco el movimiento del software libre, algo así como de «Comunistas».
En 1998 Bruce Perens y Eric S. Raymond fundaron OSI (Open Source Initiative) para quitarle esa capa que disgustaba a los empresarios y promover al final de cuentas lo mismo pero con un lavado de cara.
Veían como muy radical e incluso amenazador al movimiento de Richard Stallman del software libre y no querían que se hablase de «libertad» y si de «Apertura». La palabra libertad en las empresas no terminaba de encajar.
En vez de 4 libertades lo llamaron los 10 puntos y se montaron su chiringuito:
- Libre redistribución: el software debe poder ser regalado o vendido libremente.
- Código fuente: el código fuente debe estar incluido u obtenerse libremente.
- Trabajos derivados: la redistribución de modificaciones debe estar permitida.
- Integridad del código fuente del autor: las licencias pueden requerir que las modificaciones sean redistribuidas solo como parches.
- La licencia no debe discriminar a ninguna persona o grupo: nadie puede dejarse fuera.
- Sin discriminación de áreas de iniciativa: los usuarios comerciales no pueden ser excluidos.
- Distribución de la licencia: deben aplicarse los mismos derechos a todo el que reciba el programa.
- La licencia no debe ser específica de un producto: el programa no puede licenciarse solo como parte de una distribución mayor.
- La licencia no debe restringir otro software: la licencia no puede obligar a que algún otro software que sea distribuido con el software abierto deba también ser de código abierto.
- La licencia debe ser tecnológicamente neutral: no debe requerirse la aceptación de la licencia por medio de un acceso por clic de ratón o de otra forma específica del medio de soporte del software.
Otras licencias
LGPL – Para librerías. Algunas librerías en Linux utilizan la LGPL
BSD – A diferencia de la GPL las licencias BSD permiten distribuir modificaciones bajo otras licencias.
MIT – Es una licencia muy corta, de unas 160 palabras. La licencia MIT permite reutilizar software dentro de Software privativo.
Apache – No es una licencia copyleft, ya que no requiere la redistribución del código fuente cuando se distribuyen versiones modificadas.
Modelos de negocio en el mundo del software libre
Servicios y soporte – El software es libre pero se gana dinero dando soporte e incluso ofreciendo servicios. Un ejemplo podría ser que la empresa que desarrolla un juego libre ofrece servicios de servidores para jugar online.
Licencia dual – Como ocurre con Ghostscript puedes tener el software con 2 licencias: Una libre y otra comercial.
Múltiples productos – Puedes disponer de un software libre disponible para la comunidad y mantenido por tu empresa pero al mismo tiempo ofrecer muchos otros productos como pueden ser manuales, otro software, etc …
Recompensas – Llamado también Bounties. Son un método Crowdfunding en el que ofreces features del software y la gente pone pasta para que se haga.
Donaciones – Pedir pasta y que te la den porque tu producto mola y es bueno para la gente.
Y eso es más o menos lo que se puede saber por encima de las licencias en los mundillos del software libre.