Es especialista en bloquear todo proceso. Le encantan las asambleas y le encanta que sean largas. El «Dr N0» recibe ese apodo por decir a todo NO.
Intentar un consenso de cualquier tipo es imposible con un Dr. No delante ya que a todo dirá que NO y tendrá algún argumento para que no se haga algo.
El «Dr. No» es una especie de Troll asambleario. El «Dr. No» crece interiormente conforme retrasa y bloquea más propuestas.
Una forma de neutralizar sus poderes es preguntarle por sus vacaciones y lanzar las propuestas cuando él no esté presente. Es una jugada fea pero habitual en todas las asambleas en las que se sabe que el «Dr. No» no dejará que nada cambie.
El «Dr. No» es muy peligroso. Un «Dr. No» que esté constantemente paralizando y bloqueando propuestas supondrá el fin del grupo con el tiempo. Nadie quiere ir a un sitio en el que las asambleas duran 5 horas y conseguir un consenso en algo es tan complicado por tener a un «Dr. No» bloqueando. Si de por si las asambleas son el espacio para tomar decisiones y eso suele costarnos a todos/as bastante, con un Dr. No dejará todo el mundo de ir a las asambleas.
Se puede decir NO a algo. Evidentemente. Pero no se puede estar diciendo No a todo.
Es muy peligroso un «Dr. No» en un grupo ya que podría forzar el tener que votar las propuestas y decisiones. Lo ideal en un grupo sano es intentar el consenso. Normalmente es posible llegar a consensos y es lo ideal ya que si se termina votando empiezas a dividir a la gente en bandos.
Las votaciones por tanto fragmentarían al grupo con el tiempo. Estaría el que ha votado noseque, el que ha votado nosecuantas, … y no digamos si se hacen de forma anónima. Nadie quedrá proponer nada en un grupo así.
Para cargarse a un «Dr. No» se ha de recurrir a que él cada vez que diga NO proponga una alternativa. Y cuando proponga la alternativa decirle «NO». Aunque parece una chorrada un «Dr. No» se combate con otro «Dr. No». No + No = Si . Ha de probar de su propia medicina.
Es bueno también mirar si el Dr. No es así de tonto por algo o es que es un policía infiltrado.